-ay cómo le deseo
-¿Lo dices en serio? si tanto la deseas ¿por qué no vas a por ella?
-¿estás loca? Apenas la conozco, imagina lo que diría si aparezco frente a su puerta diciendo que la amo.
-No le veo nada de malo.
-¿Nada de malo? Tan sólo dime que pasaría si me rechaza. Creo que no podría vivir sin ella.
-Pero, si da el sí, ganarías; si da un no tienes toda la vida para recuperarte y ella toda la vida para conocerte.
-Bien, pero si dice que sí, creo que no sabría que hacer después.
-Vamos, si en verdad la amas sabrías que hacer, sólo déjate llevar.
-¿Qué tal si no la amo?
-Entonces no tendrías esta conversación.
-Bien, tienes razón, creo que se lo diré.
-Ve, tu puedes.
-¿Quieres ser mi novia?
-¿Ehhhh?
-Bueno no esperaba esa repuesta.
-Ni yo esa pregunta.
-Bien, que dices ¿Aceptas?
-Digo que tienes toda la vida para recuperarte.
-¿Es eso un no?
-No, es un ya veremos.
12 jul 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario